la madrre Rrusia

12X042006
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Querido amor, amor, quiero decirte que me sé unido a ti de forma inevitable, que me sé habitado por ti completamente, que te quiero enseñar todas las cosas que aún no he aprendido y que quiero aprender todas las cosas que ya me has enseñado, que mi corazón se escribe sólo con las letras de tu nombre y que palpita dentro de tu pecho que adoro. Que eres mía y sólo mía y nada más que mía y que soy tuyo y sólo tuyo y nada más que tuyo y que esto que digo no es un capricho veleidoso del deseo, ni un derecho que te pido, ni un regalo que te doy sino una ley fundamental del universo.

Ahora que me perdono que la ignorancia y la impaciencia y la lesa humanidad en la que también consisto me llevara a decir amor con el alma henchida a unos ojos distintos de los tuyos porque comprendo que no estar juntos en el fondo no era más que un error subsanable, quiero decirte amor lo que ya sientes, que mi amor es tan grande que no puedo esconderlo aunque quisiera y que habremos de ensanchar el universo, de abrirle las venas al espacio, de expandir nuestras fronteras si queremos que viva un poco menos apretado.

Y a los que miran con los ojos limpios y la voz que canta pedirles perdón por mi estatura, que yo empecé a decir que me marchaba y he vuelto un alef subcero de veces más grande a relataros el milagro mayor de cuantos se han obrado en mi persona. Y deciros que soy la prueba viva de que el amor existe y creedme cuando os digo que en vuestros corazones también existe una semilla donde duermen los sueños, y que si la regáis con mimo, con constancia, con paciencia, con esfuerzo, con ganas locas, con fe y con muchísima suerte, también vosotros sentiréis la vida entrando a borbotones por todos los rincones.

Alejandra, mi amor, toma mi mano y ven a mi abrazo a contemplar el vasto imperio que nuestro amor alumbra.

Durante cinco minutos.